martes, 10 de marzo de 2009

Pasteles de amistad


Recuerdo amigos de agua transparente con vista de halcón. Como aquel olor a castañas asadas que nunca se me borrará de la mente esperando que su dueño se declare. Siempre he pensado que los sentimientos huelen, entre comillas. Incluso se pueden escuchar y ver, sin pensar que la piel te pedirá paso para ponerse en pie por tal especial sentir. Qué emoción cuando escuchas la voz de aquel que pensaste que nunca volvería a golpear tus oídos. Despertando mis palabras como fuegos artificiales para que el compadre se entere de que en mi cabeza hoy es fiesta. Un compañero no es sólo eso, es la parte mas pura de uno mismo que interpretamos amando los momentos que hemos dejado atrás. Publicando el diario que nos acompaña al despertar sin darnos cuenta. Un amigo de verdad, aparte de poder ser un novato en la amistad, puede ser quien incline la balanza de tu vida para futuros desenlaces depositados en el pozo mas profundo de nuestro ser. Esperando asomar la cabeza cual orden se firmó un día cualquiera. Rubios cubanos, leones que no muerden, chicharreros rodeados de mar y buena gente andaluza son ingredientes de mi sangre, herencia sobre el camino al que me enfrento cada día. En el terreno acabaremos nuestros días, pero nunca abandonaremos el barco de los que consideramos nuestros amigos por que ellos son, aparte de los que hemos criado, nuestra herencia que marcará el paso del futuro adelantado. Porque eso es lo que nos queda, familia y hermanos de sangre. Brinda siempre por ellos, porque te aseguro amigo que es sinonimo de felicidad.

1 comentario:

  1. Las continuas amenazas que he recibido desde que realicé mi primer comentario en este foro me han llevado a moderar el tono de mis reflexiones. Ahora sólo me atrevo a decir que el ritmo de publicación es muy lento. ¡Queremos más!

    Recuerdo amigos de agua transparente con vista de halcón. Como aquel olor a castañas asadas que nunca se me borrará de la mente esperando que su dueño se declare. Siempre he pensado que los sentimientos huelen, entre comillas. Incluso se pueden escuchar y ver, sin pensar que la piel te pedirá paso para ponerse en pie por tal especial sentir. Qué emoción cuando escuchas la voz de aquel que pensaste que nunca volvería a golpear tus oídos. Despertando mis palabras como fuegos artificiales para que el compadre se entere de que en mi cabeza hoy es fiesta. Un compañero no es sólo eso, es la parte mas pura de uno mismo que interpretamos amando los momentos que hemos dejado atrás. Publicando el diario que nos acompaña al despertar sin darnos cuenta. Un amigo de verdad, aparte de poder ser un novato en la amistad, puede ser quien incline la balanza de tu vida para futuros desenlaces depositados en el pozo mas profundo de nuestro ser. Esperando asomar la cabeza cual orden se firmó un día cualquiera. Rubios cubanos, leones que no muerden, chicharreros rodeados de mar y buena gente andaluza son ingredientes de mi sangre, herencia sobre el camino al que me enfrento cada día. En el terreno acabaremos nuestros días, pero nunca abandonaremos el barco de los que consideramos nuestros amigos por que ellos son, aparte de los que hemos criado, nuestra herencia que marcará el paso del futuro adelantado. Porque eso es lo que nos queda, familia y hermanos de sangre. Brinda siempre por ellos, porque te aseguro amigo que es sinonimo de felicidad.

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